Las orquídeas del género Ophrys presentan un mecanismo de polinización conocido como pseudocopulación. Como otros tantos géneros de orquídeas no produce néctar con lo que realmente al insecto no le ofrecen nada a cambio de la polinización.
Como puede verse en las imágenes, la orquídea reproduce perfectamente la silueta de un insecto sobre una flor, de manera que los machos de las especies de abejas y avispas solitarias se sienten atraido por este montaje que simula precisamente la silueta femenina, además de producir un olor similar al que producen las glándulas mandibulares de las hembras lo que incita al macho a intentar copular con la flor. Allí pueden permanecer largos periodos de tiempo gracias a los olores producidos, durante esta falsa copulación el polen de la flor va pegándose al insecto, cuando el insecto abandona la flor y encuentra otro repite el mismo proceso con la diferencia de que además de recoger nuevo polen también soltará parte del que llega completando el proceso de polinización.
Este sistema de polinización podría parecer contrapoducente en el sentido de que si los machos copulan con flores en vez de con las hembras o con ambas se pierda efectividad en la reproducción perjudicando a los insectos, y por consiguiente a la planta que perdería al agente polinizador, sin embargo resulta que este tipo de polinización es posible debido a que los machos de estas abajas y avispas nacen unas semanas antes que las hembras (proterandia), una vez que han nacido las hembras se olvidan de las flores que ya han sido polinizadas.