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como fertilizar?

Es importante recordar que la mayoría de las orquídeas crecen sobre las ramas de los árboles (epífitas) o las piedras (litófitas), y son pocas las que crecen en la tierra (terrestres) de donde obtienen los minerales necesarios para su normal crecimiento.

En la naturaleza las epífitas y las litófitas, obtienen los minerales a partir del agua de lluvia que escurre sobre ellas.  Esta agua contiene concentraciones muy bajas de minerales que se complementa con la materia orgánica que recoge a su paso. Por lo tanto, las orquídeas NO requieran grandes cantidades de nutrientes minerales y por lo tanto deben ser siempre fertilizadas en forma adecuada.  Las orquídeas son intolerantes al exceso de sales y minerales; si fertilizas de más puedes quemar sus raíces y causar daño a la planta.

Síntomas de exceso de fertilización:

  • puntas de raíces negras o café
  • puntas de las hojas negras o café
  • acumulación de sales (cristales blancos o amarillo pálido) en el sustrato de crecimiento o alrededor de la parte superior de la maceta

Solución: 

enjuagar con varios riegos de agua y evitar fertilizar por unas dos semanas, regando solamente con agua, hasta que la planta tenga una apariencia saludable.  Si el daño es mayor, entonces tendremos que cortar (con cutter o tijeras previamente desinfectadas) y cauterizar las zonas dañadas y cambiar el sustrato orgánico por uno nuevo.  En el caso de la LECA solo basta enjuagarla abundantemente.

Como lo hacemos nosotros que cultivamos en semi-hidroponía: una vez por semana vaciamos la reserva de las macetas o floreros y enjuagamos con agua tibia la planta.  Preparamos el fertilizante usando la mitad de la dosis recomendada en el empaque y complementamos con Humus de Lombriz, siempre con agua tibia.  Tapamos los hoyos en las macetas que los tienen con cinta de aislar (los floreros de vidrio no tienen hoyos) y regamos hasta la base de la planta.  Dejamos reposar de 10 a 20 minutos (dependiendo del clima) y vaciamos hasta el nivel de la reserva.  Cada 3 riegos, descansamos a la planta regándola solamente con agua.  En épocas de frío, aumentamos el espacio entre riegos de 7 días (normal) a 10 días.

Si tu medio es sustrato o musgo, deja correr el agua del grifo abundantemente por el medio para enjuagarlo; después fertiliza como lo indicamos arriba.

Si prefieres fertilizar cada dos semanas, usa la cantidad indicada en el empaque y alterna una semana regando con agua solamente y otra semana con fertilizantes inorgánico + orgánico.  Siempre con agua tibia!!!

 

tipos de fertilizante

Existen fertilizantes inorgánicos o químicos, y orgánicos (abonos). Todos los fertilizantes están constituidos por tres ingredientes principales:

– Nitrógeno (N): que promueve el crecimiento general de la planta.

– Fósforo (P): que promueve la floración.

– Potasio (K: que promueve la formación de raíces fuertes.

La proporción en que se encuentran en un fertilizante comercial cualquiera está indicada en la etiqueta por un código de tres números: por ejemplo: 20-10-10 (N-P-K).   Significa que tiene 20% de nitrógeno, 10% de fósforo y 10% de potasio.  El restante 60% esta constituido por otros minerales como calcio, magnesio, cobalto, hierro, etc.

Estos ingredientes se mezclan en distintas proporciones debido a que las plantas tienen diferentes necesidades a lo largo del año.

Cuando la planta está en proceso de floración, es necesaria una combinación que tenga más fósforo (por ejemplo: 4-8-7);  cuando está en proceso de crecimiento, requieren más nitrógeno y potasio (por ejemplo, 7-4-10).

El fertilizante orgánico ideal para tus orquídeas es el Humus de Lombriz, que es un producto compuesto por materia orgánica, nutrientes naturales, ÁCIDOS HÚMICOS Y FÚLVICOS, además de una gran riqueza microbiana y compuestos fitoestimulantes que lo convierten en el complemento nutrimental ideal.

Lo puedes hacer tu mismo, si eres paciente!!  Si no, existen granjas de lombricomposteo dedicadas a producirlo y envasarlo para que comodamente lo usemos en nuestras casas.

Otra ventaja del humus de lombriz, es que además es un fungicida y pesticida natural; y huele a tierra mojada, no a abono como se podría pensar.  Lo puedes usar diluido para rociar las hojas y flores de tus orquídeas cada 15 días y así además de fertilizarlas, les ayudas a fortalecer su sistema inmunológico contra enfermedades y algunas plagas.

DATO: Las orquídeas también absorben nutrientes por la parte inferior de las hojas

Los fertilizantes se venden en muchas formas: granulados, líquidos, tabletas, polvo, etc.  Recomendamos usar aquellos formulados especialmente para orquídeas y que sean solubles en agua (concentrados, polvo o granulos).

Los que no son solubles en agua (granulos o polvos) o los llamados de “aporte lento”, tienen concentraciones minerales más altas y es más fácil que quemen las raíces.

 

Tabla de Conversión

Muchas instrucciones vienen expresadas en galones u onzas, medidas con las que tal vez no estés familiarizado.  Aquí te dejamos una pequeña tabla de conversión para que te sea más fácil:

conversion  

Por lo tanto, si tu fertilizante te indica que diluyas ½ cucharadita por galón de agua (en inglés y abreviado sería: ½ tsp / gal), tienes que diluir media cucharada en 3.8 litros; y no pasa nada si lo haces en 4 para no ser tan exactos!! Si necesitas menos de 4 litros, como cualquier receta, habrá que dividir (o multiplicar si necesitas más).

Siguiendo la regla de fertilizar más suave de lo que dice la etiqueta, con el ejemplo anterior lo que haríamos sería: ¼ de cucharadita en 4 litros de agua.

TIP: si solo necesitas ½ litro de agua para fertlizar, la dosis de fertlizante son 4 gotas (con gotero); siguiendo la regla de suavizar, aplica solamente 2 gotas.